Las toallitas y tampones son uno de los métodos más usados para acompañar el proceso de sangrado del ciclo menstrual, yo misma he utilizado estos métodos durante largos años. Pero, con la información necesaria: ¿seguiríamos utilizándolas? ¿son efectivas? ¿son saludables? ¿sabemos con qué están confeccionadas? ¿son económicas? ¿son cómodas?. Éstas preguntas entre otras iremos contestando en este artículo.
Vamos a comenzar por lo que generalmente ya sabemos: los podemos conseguir fácilmente en cualquier farmacia, almacén o supermercado. A la hora de elegir, tenemos varias opciones de marcas, tamaños y modelos. Con frecuencia, un paquete nos alcanza solo para un ciclo de sangrado, esto se debe a que cada 4 horas se recomienda cambiarla para evitar infecciones por la humedad que se acumula e incluso, hay veces en que las debemos cambiarlo antes si es necesario, lo que nos lleva a compras frecuentes y gastar una suma de dinero bastante alta cada año.
A mi parecer, no son muy cómodas y no siempre son efectivas, en ocasiones no absorben todo el sangrado y nos manchamos la ropa, o tenemos continuamente ese miedo de que en algún momento nos va a pasar o la sensación de que nos pasó aunque en realidad no hayamos llegado a mancharnos, los tampones pueden ocasionarnos irritaciones, sobre todo si el sangrado es poco. Además, no nos da la libertad para poder hacer cualquier tipo de actividad física o deporte, sobre todo si implica meternos al agua.
Ahora pasemos a lo que generalmente no sabemos: cada marca utiliza una serie de materiales que pueden variar entre una y otra, lo que no varía es el uso de químicos, algunos de ellos cumplen el objetivo de absorción, pero al mismo tiempo, al estar en contacto directo con el cuerpo, son nocivos para la salud menstrual.
En el año 2015 la Universidad de la Plata hizo un estudio donde encontró glifosato en el 85% de hisopos, pañales y productos de higiene menstrual. Para quienes desconocen, el glifosato es un herbicida de amplio espectro no selectivo, es decir, efectivo contra todo. La OMS lo calificó como posible cancerígeno.
Por otro lado, su impacto ambiental también es preocupante
(…) para su fabricación se utilizan grandes cantidades de pasta fluff que se obtiene de cultivos de Pino provenientes del desmonte de selvas nativas (Mileo, Agostina; 2018).»
Al ser un producto descartable no reciclable, produce una cantidad de residuos enorme, su tiempo de biodegradación puede llegar a demorar 1000 años, imaginen la cantidad de desechos que producimos cada año y que al morirnos van a seguir contaminando el planeta por mucho tiempo más.
¿Entonces? Hay otras alternativas de productos más económicos, saludables y ecológicos como la copa menstrual y las toallitas y protectores reutilizables de tela. Personalmente, uso hace más de 3 años copa menstrual y protectores de tela y mi relación con el ciclo menstrual y mis actividades diarias cambiaron rotunda y positivamente.
Bibliografía
Mileo, A. (2018). Que la ciencia te acompañe: A luchar por tus derechos. Argentina: Penguin Random House Grupo Editorial.
Marino, Damián. (2019/10/06). https://investiga.unlp.edu.ar/cienciaenaccion/cientificos-de-la-unlp-advierten-que-el-glifosato-esta-en-todos-lados-10058. Científicos de la UNLP advierten que el glifosato está en todos lados.
